
Great. Ha sido, es un fin de mierda. Un fin de semana espantoso, horrible, desastroso, espantoso... etcétera, etcétera.
Primero, mi semana ha estado regular... sí, se podría decir. Recibí más malas notas, algunas regulares que podrían estar mejor; pero sí, lo que resalta, naturalmente, son las putas malas notas.
Bueno, prosigo. ¿Qué es lo que salva a la semana? Sísísí, a los que pensaron que tiene que ver con mi aspecto, mi peso, mi figura, mi "anorexia", mi lo que sea. Me propuse, esta vez de verdad, bajar de peso. Y sí que lo logré, lo estoy logrando. Y eso me hace feliz. Muy muy muy muy muy, DEMASIADO feliz. No sé si logren entender la felicidad que me causa estar delgada y adelgazar. Es una sensación increíble, todo lo contrario a estar gorda y engordar, valga la redundancia.
Volví a vomitar. Estamos sábado, lo hice hoy y lo hice el jueves. Y en realidad no me importa, porque no pienso volver a hacerlo. Al menos espero no volver a hacerlo, porque me hace mal, me hace daño y me impide cantar bien.
El jueves lo hice no porque me sintiera gorda por lo que había comido, no. Comí canchita, cereal de chocolate, leche chocolatada... NADA a comparación de los de mi clase... (estaba en el cole) pero no estoy para compararme con ellos, JAMÁS como igual que ellos. En fin, lo hice porque me sentí pésimo.
Pequeño detalle olvidado: mi estómago ya se está haciendo "chiquito" otra vez, ya no está acostumbrado a la misma cantidad de comida: al inodoro; sentirme bien otra vez. Tengo que medirme más, no me dí cuenta.
Y hoy, fue tonto. Comí hamburguesas con mi mamá, pero eso se quedo. Hoy en la noche comí cereales con fresas y plátano y yogurt. Aquí tampoco me sentí gorda, pero me sentí culpable y estúpida. Estúpida porque arruiné el trabajo de 5 días en algo estúpido, porque lógicamente no tenía hambre.
Quería ir al baño, hice pis. Jalé, me volteé, me agaché y me hice una pregunta: "¿Cantar o estar flaca? Cantar o estar flaca, cantar o estar flaca, cantar o estar flaca. Al final y al cabo igual no lo voy a volver a hacer, ¿verdad? Y en verdad no quiero engordar, todavía me queda un día en el cuál me van a obligar a comer."
Vomitar, sí. Elegí vomitar a pesar de que cantar es una de mis más grandes pasiones junto con leer y escribir. ¿Tan fuerte es mi necesidad de estar flaca? Cada vez que adelgazo, la respuesta sí se va fortaleciendo más y más.
Hoy en mi cole hubo una consulta de padres con profesores. Fue MARAVILLOSO. En serio, ¿de verdad era necesario ir a la puta cita con la puta psicóloga este puto día? Al parecer, sí. Y la puta esa me chancó, YO SÉ QUE A PROPÓSITO. ¡La odio la odio la odio laaaaaaa ODIOOOO! Y a veces, sin embargo, me cae bien.
Eeeeeen fin. Por mis lindísimas notas, obviamente no me dejaron ir a la linda fiestita que hay hoy. En este momento. ¡AAJJJJJ QUE MOLESTIA! Mis papás son preciosos. Por eso cuando estaba insistiendo como en la cuarta vez, me sentí mierda. Bueno, soy mierda. Pero ese es otro tema. Y aún así, los voy a castigar. Bueno es una idea que surgió de un berrinche conmigo misma hace un rato: VOY A ADELGAZAR A PASOS AGIGANTADOS. No me importa cómo, pero lo voy a lograr. Y sé que sí, porque si lo he logrado toda esta semana, sé que puedo la siguiente. Además porque quiero, lo quiero. En verdad deseo esto.
No me gusto gorda, pues flaca sí. Así que en eso me voy a convertir. Porque siento que el espíritu que me impulsaba a ser Ana, ha vuelto. Por lo tanto, he vuelto. Falta muy poco.
Lily.
ps. Ok, leí todo esto. Y me sentí MÁS mierda. Definitivamente es un berrinche. Es decir, si lo voy a hacer (adelgazar). Pero no para "castigarlos", sino porque odio estar gorda. Ok, sí sé que no estoy gorda, pero tampoco flaca. Eeepa, y flaca quiero estar.